Esta semana arranca el verano y con él se asientan las altas temperaturas. Salimos más, los días son más largos, pero no sólo eso, con la época estival también llega la necesidad de preparar nuestros hogares de cara a la nueva temporada que tenemos por delante.

Hoy en el blog os vamos a dar una serie de trucos y recomendaciones de cara a poner vuestra casa a punto de cara al verano y, como no podía ser de otra manera, comenzaremos por el núcleo de convivencia de cada casa, la cocina. Si eres un amante de la cocina y disfrutas de platos frescos y saludables, es tu momento. 

Prepara tu cocina para el verano

Comencemos por el principio, limpiar a fondo la cocina. Debemos vaciar cada mueble y limpiarlos bien por dentro. Además, debemos asegurarnos que nuestros electrodomésticos estén libres de polvo. Es una buena oportunidad de deshacerte de todo aquello que ya no utilices y organizarlo todo bien. 

Si es necesario, hazte con un buen ventilador o aire acondicionado para mantener una temperatura agradable mientras cocinas. Eso sin olvidar la importancia de una buena iluminación. 

Por otro lado, es importante hacernos con los utensilios adecuados para cocinar durante el verano. Por ejemplo, una buena parrilla para cocinar al aire libre, así como un buen juego de cuchillos para cortar frutas y verduras frescas. También es recomendable que tengas una batidora de mano para preparar batidos y smoothies frescos.

También es importante preparar nuestra despensa con productos de temporada, con una buena selección de frutas y verduras frescas, así como de hierbas y especias para dar sabor a tus comidas. Deja a un lado los refrescos y ten siempre a mano una limonada casera bien fresca.

Mantener la casa fresca en verano

La llegada del verano nos alegra en gran medida pero también es cierto que nos toca lidiar contra las altas temperaturas. Por suerte, existen una serie de trucos que nos ayudarán a mantener la casa fresca durante esta época del año, sin recurrir al aire acondicionado ni a llenar la casa de ventiladores. Con ello, además contribuirás al cuidado del medioambiente. 

Para ello es fundamental controlar la temperatura. Es sumamente importante mantener la casa a 20ªC para evitar que el calor sea sofocante. Para ello, debemos hacer lo siguiente:

  1. Ventilar toda la casa a primera hora de la mañana. Así renovamos el aire, evitamos malos olores, el exceso de humedad y que el aire en el interior sea más agradable. Debemos aprovechar que, a primera hora, las temperaturas son más bajas. El tiempo estimado de ventilación óptima es de entre 30 y 45 minutos.
  2. Recuerda bajar las persianas. Una vez ventilada la casa, lo ideal es bajar las persianas para mantener el aire fresco y que no entre el calor. Con ello, evitaremos en algunos casos poner en marcha el aire acondicionado o retrasaremos al máximo esa necesidad.
  3. Recuerda aislar bien las ventanas. Aunque es habitual pensar en esto durante el invierno, lo cierto es que tan importante es un buen aislamiento durante la época de frío como durante los meses más cálidos. Si el Sol incide de manera directa sobre nuestras ventanas, una forma de hacer que incidan en menor medida los rayos sobre ella, es colocar un buen toldo. Unas cortinas de un material espeso, de un color que repeler el color como el blanco o el gris, serán grandes aliados.
  4. Encender la luz únicamente cuando sea necesario. Evitar encender luces y aparatos eléctricos es fundamental, todos ellos aunque no lo creamos, son fuente de calor. Las bombillas LED son las que menos calor desprende y además nos ayudarán a ahorrar energía y, en consecuencia, en la factura de la luz. Además, conviene recordar que dejar aparatos eléctricos en “santd by” también emiten calor, por lo que es mejor apagarlos del todo.
  5. Cambiar las sábanas y las fundas de almohada cada semana. Es hora de guardar mantas, colchas y edredones. Nuestros mejores aliados durante el verano para vestir la cama, serán el lino y el algodón. Sábanas limpias y una ducha fresquita antes de acostarnos favorecen a conciliar el sueño y descansar en esta época del año.
  6. Hazte con plantas que refresquen el ambiente. Algunos ejemplos son la Lengua de tigre, la Cinta o la Areca. Cuando tenemos plantas de grandes hojas verdes, si las rociamos con agua, nuestra casa estará más fresca. Además, si tenemos terraza o patio, podemos regar la superficie para refrescar el ambiente, sobre todo si están muy expuestas al Sol.
  7. Usa el ventilador cuando sea necesario. Para mayor efectividad, puedes colocar un cuenco con hielo y situarlo en ángulo frente al ventilador. Una solución ideal para los días más calurosos.
  8. Utiliza los sistemas extractores. Aunque su principal uso sea para eliminar malos olores en la cocina o la acumulación de vaho y humo, lo cierto es que son el sistema perfecto para eliminar calor. Recuerda que es fundamental mantener siempre limpio tu extractor.
  9. Usar el horno lo menos posible. El horno es, sin lugar a duda, el electrodoméstico que más calor emite. Aprovechando los sabores del verano, mejor cambiar las recetas hechas en el horno por platos más ligeros y frescos. Como consejo extra, aprovecha la noche para poner en marcha otros electrodomésticos como el lavavajillas o la lavadora, ya que tienden a emitir calor. Eso sí, siempre y cuando estos sean silenciosos y no molesten a los vecinos.
  10. Haz que el aire fresco entre cada noche en tu casa.Ventilar por la noche cuando la temperatura baja nos ayudará a dormir más frescos.

Con estos trucos conseguirás mantener tu casa fresca durante el verano. Pero aún puedes hacer más para conseguir que sea más llevadero. Por ejemplo, hidratarte bien y controlar la temperatura corporal. Refrescate y evita la actividad física a las horas de más calor. También es importante reducir el consumo de bebidas alcohólicas, la cafeína o el azúcar y evitar las comidas copiosas. Ahora sólo queda poner todos estos consejos en práctica y ¡disfrutar del verano!