En Aytosa Studio, adaptar cada proyecto a las necesidades del usuario es fundamental para obtener el mejor resultado. Las cocinas integradas en espacios abiertos diseñados para compartir y disfrutar en la mejor compañía, eliminan las divisiones y favorecen la libre circulación.

Una cocina exclusiva con isla, planteada totalmente abierta al comedor y al salón se convierte en el nexo de unión entre todas estas estancias. Con este tipo de proyectos, se consigue crear una sensación de amplitud superior. Además, favorece que los usuarios se muevan libremente por el espacio sin que la interacción entre los mismos disminuya, sino todo lo contrario. Es decir, se rompe la barrera entre la zona de trabajo y la de ocio. 

Aprovechar al máximo el espacio disponible

Cada vez es más habitual encontrar hogares con dimensiones más reducidas, por ello siempre es importante aportar la máxima capacidad en el mínimo espacio. De este modo, se aprovecha mucho más la estancia y evitaremos tener cosas a la vista, lo que aumenta la sensación de desorden.

Para almacenar de la forma más compacta y organizada posible los muebles columna son una gran solución. Por su parte, los cajones zócalo ubicados en la isla, aumentan su capacidad y aprovechan el espacio hasta el suelo. Además, para adaptarse aún más a la necesidades del cliente, los cajones superiores se pueden personalizar con distintos acabados.

En la cocina, tener todo accesible y organizado nos ayudará en nuestro día a día. Además, eliminar el ruido visual y tener todo integrado, nos ayudará a ver todo más ordenado y limpio. Para ello, contar con una zona de columnas en la que integremos zona de trabajo y electrodomésticos que permita cerrarla, es una solución eficiente y eficaz para tener todo apartado de la vista y recogido. 

Un armario vitrina para integrar espacios

Para integrar las distintas estancias que componen el espacio en la zona de comedor es muy útil colocar un mueble singular como el armario vitrina. En este caso, con cuerpo acabado en mármol gris, con marco de aluminio negro y vidrio ahumado. Su función, además de convertirse en un elemento decorativo en sí mismo, puede servir para guardar la vajilla e, incluso, una lámpara.